El 2007 junto a sus colegas encontraron 15 bebés manatíes muertos en cautiverio, este hecho de animadversión a la vida los impulsó a actuar y formar el CREA. En aquel entonces no existía una institución con la capacidad técnica para dedicarse al rescate y rehabilitación de esta especie, y fue así que, con constancia, dedicación, mucho trabajo y amor a la vida y la naturaleza emprendieron este camino altruista. El manatí, (Trichechus inunguis), es un mamífero que habita en las lagunas y ríos de la Amazonía peruana. “Lo consideramos la especie más noble de la selva porque no hace daño, no tiene colmillos…”, menciona Javier Velásquez. Hoy en día el CREA se dedica no solo a preservar y cuidar a los manatíes de río sino a muchas otras especies. Todos los profesionales que trabajan en este equipo tienen pasión por salvar a los animales huérfanos o lesionados. Esta labor encomiable consiste en rescatar, rehabilitar y liberar a los animales en peligro de extinción, además de educar a la población, poniendo énfasis en los niños, la humanidad del futuro, sobre la importancia de cuidar nuestras especies únicas y muy especiales. El CREA se encuentra en la carretera Iquitos – Nauta km. 13.8, y puede ser visitado por todo público. Además, hay que recalcar la labor que hacen en el mismo centro con “El bosque de Huayo” para entretener e incentivar el amor por la naturaleza.